Su apellido, Pane (dolor en inglés) suponía toda una declaración de intenciones.
A finales de los años 60, Gina Pane inició una serie de intervenciones solitarias en el paisaje que confrontaban su cuerpo con la naturaleza.
A partir de 1971, se expuso ante el público dibujando sobre su piel pequeñas heridas que, junto a la utilización de los más diversos materiales alegóricos -fuego, leche, carne, espinas...-, trataban los temas de la muerte, la indiferencia de la sociedad, el dolor, los alimentos y la problemática femenina.
En estas acciones, la herida se convertía en elemento de reflexión sobre el dolor y la capacidad del cuerpo humano para expresar los sentimientos más profundos.
A partir de 1984 profundizó en los mismos temas con trabajos escultóricos, que mostraban un desplazamiento del estudio de su cuerpo hacia los cuerpos de santos de la tradición cristiana, en su perseverante búsqueda de lo sagrado, que demostró en los últimos años de su vida.
De la auto-herida pasó a lacerar los materiales escultóricos: hierro, cobre, latón o cristal. El mismo discurso bajo una lectura mística que anticipará su muerte.
ALGUNAS OBRAS:
Escalade non anesthesiée, 1970.
Pane asciende con los pies desnudos por una escalera metálica en la que los escalones están llenos de acerados dientes. Al apoyar las palmas de las manos y las plantas de los pies estos sangran. Cuanto mayor fuerza hace para ascender más se clavan las puntas de acero en su piel y mayor es el dolor. “Denominé la acción “Escalade non anesthesiée” para protestar contra un mundo en el que todo está anestesiado. La guerra del Vietnam continuaba y mi obra tuvo una clara dimensión política”
Acción sentimental, 1973
Gina se corta la palma de la mano izquierda con una cuchilla de afeitar y deja que su sangre, al manar, resbale entre los dedos. En todas las acciones se encuentra elementos contradictorios que pueden significar vida o muerte. Al juntarlos Gina Pane intenta enfrentarse al temor de la muerte y encontrar un sentido a la existencia. A través de las incisiones denota desinterés por los conceptos de belleza y perfección corporal vigentes.
Psyché, 1974.
Se hace una herida en cruz sobre el vientre. El ombligo se convierte en el punto central. Nos recuerda el carácter procreador del vientre femenino (el ombligo es el punto de unión de madre e hijo y la fuente de alimento del hijo). Las heridas con forma de cruz cristiana, ponen de manifiesto el interés que tenía la artista por la religión. Gina Pane cree en Dios, dice que ”Dios es obligatoriamente algo que está muy presente”
Pane no es dolor en inglés. Pain, es dolor en inglés. ._.
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